graciasemptyporemptytuemptyvisita

sábado, 30 de junio de 2012

Les traigo un cuento triste.



Ok, yo no les pongo imágenes en mis historias porque ¿sabían que no poner imágenes en los textos, historias estimula la imaginación? sí, la estimula porque tu te imaginas como fue lo que pasó, además de que el cuento lo inventé yo y pues las imágenes se quedan en mi mente, y como no soy dibujante ni nada pues no les puedo manifestar con alguna ilustración lo que estaba en mi mente.
PD: Lucía perdón por usar tu nombre pero fue lo único que se me ocurrió porque "Sofía" rima con "Lucía" y pues Lucía es un nombre bonito y me gustó.
Aviso: Tal vez mañana no publique, tal vez si o tal vez no, así que a las escritoras que por favor mañana publiquen algo, yo no sé si mañana podré publicar por eso les estoy trayendo varias entradas  hoy.
Espero que les guste este cuento sobre el perdón, sobre los vicios, chicos no son buenos, y perdonar uuff... te lleva a la paz. No se olviden de comentar quien quiera....
"Una historia de hermanos"
Hace no mucho tiempo, vivía una joven de unos 15 años, llamada Sofía, una chica normal, sólo que podía ver las almas, sólo ella lo sabía.
Después de un tiempo, llegó una alma de una chica, mas o menos de la edad de Sofía, llamada Lucía. Ella venía muy a menudo a visitar a Sofía, le contaba sobre su muerte:
̶̵̶̶̵̶— Yo tenía un hermano de 18 años, estaba metido en el mundo de las drogas, yo no lo quería ver, era insoportable, traía a sus amigos a la casa, tomaban, bailaban, era un infierno para mí
—Eso debió ser terrible, pero, ¿porqué mejor no trataron de ayudarlo?
— ¡Claro que traté! bueno, traté porque no tenía a nadie, la madrastra se fue y nos abandonó después de la muerte de nuestro padre.
— Entonces... ¿dejaste de tratar? ¿porqué? — le preguntó dudosa.
—Yo estaba ahorrando para mis XV, tenía alrededor de 1000 pesos.
—¿Y luego?— preguntó.
— Le tuve desprecio, cuando me enteré de que tomó el dinero, el poco dinero que teníamos, ese dinero que iba a servir para mi fiesta, pero sabía que no iba a ser suficiente, así que estaba guardándolo por si no hacíamos la fiesta y nos faltaba alimento, y lo peor, tomó el dinero para consumir la maldita droga.
—Ahora entiendo— le respondió comprensiva—¿pero cómo llegaste aquí?
— He estado penando, y vi que tal vez podías ayudarme.
—¿Penando? ¿porqué? ¿ayudarte? ¿para qué?— Preguntó sorprendida y dudosa.
—Porque molesta, harta de la vida, me maté a mi misma, sin apoyo de nadie.
—Pero tu hermano...
— Hace ya 30 años de esto, no he sabido de él, si murió, si está vivo— dijo esto interrumpiéndola y una lágrima salió de sus ojos expresando dolor.
—Pues, una vez vino un joven de unos 18 o 20 años, venía y repetía una y otra vez esta frase "Es mi culpa, es mi culpa,Lucía, Lucía, es mi culpa" Yo trataba de consolarlo, pero parecía no verme.
—Él es.— lo dijo con la cara triste y al mismo tiempo ella pensaba en que podría volver a reunirse con su hermano.— Rubén... te quiero mucho.
De repente, vino un joven de su cuerpo salía un resplandor, por así decirlo, triste y gris, su cara estaba triste, y en cuanto vio a Lucía el "resplandor" se esfumó.
— Dejé todo lo malo, todas las drogas y el alcohol, y decidí ahorcarme, para no volver a drogarme.—Dijo Rubén, el joven, y entonces miró a Lucía que dijo:
—Te perdono—Con lágrimas en sus ojos continuó—No me importa, ¡te perdono!

Rubén se llenó de un resplandor, esta vez de luz, igual que su hermana. Ambos se dieron un abrazo y desaparecieron tomados de la mano, y empezando a platicar como si nada hubiera sucedido.

Algo en Sofía la hizo saber que esa era su misión, no otra más, a partir de ese día no volvió a ver ningún fantasma.

FIN

Aunque no lo crean me esforcé mucho haciendo este cuento.

No hay comentarios: